sábado, 4 de septiembre de 2010

A veces me canso de ser Goldmundo. Quisiera la paz y la sabiduría de Narciso. A veces me canso de ser un lobo de estepa y quisiera hundirme en la humanidad con la paz del que no se da cuenta de nada, del que tiene mirada de hombre niño. Sería todo muchísimo más fácil y llevadero. Y luego viene alguien y me dice que la vida no es así, que depende de cada uno mirar el mundo con ojos alegres, pero yo les digo que no es así si tienes los ojos bien abiertos: injusticia por todos lados, por todos lados hambre y dolor. Engaños, manipulaciones, maldad. El mundo me da asco.

No hay comentarios: