"Las palabras se las lleva el viento". Esto pensaba cuando comenzó a pasar por mi mente la idea de crear un Blog. Pero, si las palabras se las lleva el viento, a algún lugar han de llegar. Podría haber sido esta plataforma u otra, pero finalmente el destino llama a tu puerta, o a tu ventana si eres testarudo, y se hace oir. Así fue como se materializó una idea, una pasión arrastrada hace años, o hace milenios, si es verdad lo de la reencarnación. Así fue y así será como siempre volveré a las letras y espero arrastrarlos conmigo, aunque sea un segundo o una fracción de segundo cuando las ideas o las emociones se encuentran y ambos universos, el tuyo y el mío, se convierten en un soplo de verdad. El nombre del blog (1) viene de un recuerdo de infancia, durante un viaje, cuando mi vista se topó, ante mis ojos soprendidos, con la primera playa de arenas rosadas que alguna vez contemplé. Para llegar a ella era necesario descender por un rizco bastante agudo y al llegar al mirador se divisa una pequeña playa rodeada de unos inmensos muros de piedra. A partir de ese momento tuve la certeza de que podemos creer, soñar y sorprendernos cada día y en cada rincón del mundo. Nada es suficientemente falso ni cierto, nada se puede afirmar rotundamente ni negar, porque desde el momento en que nos creemos dueños de alguna verdad se nos cierran miles de puertas paralelas, opciones y descubrimientos nuevos y sorprendentes. Hasta la próxima.
(1) El nombre del blog al que se hace referencia es el antiguo sitio donde escribía: http://www.arenarosada.blogspot.es
